Me despierto contigo, tu con mis besos o yo con los tuyos, nunca me acuerdo. Es tu cuerpo desnudo pegado al mio el que me quita todo el frio. Me despierto con tu brazo a mi alrededor, como si no quisieras dejarme escapar, y dime si hay algo más bonito que verte abrir los ojos y decirme "Te quiero mi vida".
Me despierto con tu sonrisa pegada a mi oreja, y entonces levantamos los ojos y esta el tragaluz de tu techo, el que me deja ver el cielo por la mañana y las estrellas por la noche mientras me quedo dormida, si, entre tus brazos.
Despues de cinco minutos llega el "Mi amor, ¿estas duermiendo? Es que no tengo sueño" Y es algo tan inevitable que ya nos reimos.
Y llegan las 4 de la madrugada y no quiero dormir, por que hay tantas cosas que contarte y que me cuentes que parece que nunca acaba, cada canción que suena en el Ipod, cada beso en el cuello, cada guiño de ojos, cada sonrisa por chorradas... Y entonces siempre me preguntas "¿Que hora es?" y claro... Ya son las cuatro y media. Y apagamos la luz, nos tumbamos y vuelve a llegar el momento de no dormir, de besos, caricias... De te quieros a las cinco menos cuarto de la mañana.
Y llegan las diez, y suena el maldito despertador. Por que ambos sabemos que mi madre no puede saber que a las diez de la mañana yo estoy en tu cama.
Me dices que no, que cinco minutos más... Y nos dan las diez y cuarto y te levantas, te pones el pantalon del pijama y me haces el cafe como a mi me gusta, asi como tu sabes.
Nos tumbamos juntos en la cama a acabar el cafe y tu ya, con el cigarro de la mañana. Y vuelven los besos y las caricias... Y mierda! son las once. Empieza el "dame mi camiseta, si si, hay, debajo de eso otro encima de aquello", "espera que no encuentro la horquilla", "¡mierda! ¿donde estan las llaves?"
Y por fin salimos de casa, donde siempre se queda algo, una pulsera, un pendiente...
Y debajo de ese cielo lleno de nubes, con un frio que te mueres y esos adornos de navidad sin encender todo me parece más bonito contigo a tu lado.
